* TOXCATL Cempohuailhuitl*
Viernes 31 mayo y Sábado 1 de Junio 2013 Tenochtitlan, México DF.
Programa de actividades:
Viernes 31 de mayo 2013, 5 a 9 pm Ciclo de conferencias en relación a Toxcatl con: David Wood Cano, Luciano Contreras, Ignacio Barragán
Tepeticpac Tlahtolcalli A.C.; Sadi Carnot # 68 Col. San Rafael, dentro del Pentathlón Universitario. Cerca del metro y monumento a la Revolución, Metrobus Tabacalera.
Sábado 1 de Junio 2013, 10 am: 10:00 Concentración en el Monumento a la Revolución 11:00 Inicio de la Caminata hacia el Zócalo 12:00 Inicio de la Celebración de la veintena de Toxcatl: Danza Cósmica Elaboración colectiva de figura de Huitzilopochtli (tzoalli, amaranto) Cantos y conmemoración de la matanza de 1520 Ofrenda de Palabra 15:00 Repartición de la figura de tzoalli y compartición colectiva de alimentos, fruta y flores de la ofrenda.
* Lleva collares de palomitas de maíz, banderines de colores amarillo, negro, rojo, azul, elementos, flores. La ofrenda, Tlalmanalli u ombligo se hará con lo que llevemos todos; así también el alimento al final de la ceremonia será el aportado por todos. Compartamos mutuamente nuestra ofrenda.
Para mayores detalles en: https://www.facebook.com/groups/Toxcatl
Se invita a los dirigentes de Grupos, Calpulli, Calmecac, etc, a ser parte de la gestión. Reuniones los miércoles 8 a 10 pm en Sadi Carnot 68 col San Rafael, Metro Revolución.
ÉSTA CEREMONIA ES DE TODOS, LA ORGANIZAMOS Y HACEMOS TODOS, TODOS LOS PARTICIPANTES SOMOS RESPONSABLES.
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-TOXCATL- DETALLES Nahui Ehecatl Ilhuitl ipan Toxcatl Metztli ipan Ce Calli Xihuitl (sábado 1 junio 2013, 10 am)
Quien vaya ofrendar algo para el ombligo y también guste apoyar en su formación puede hacerlo desde las 9 am en el Zócalo donde habrá gente armando el Tlalmanalli. Qué se puede aportar?: Amaranto (en semilla tostada o alegrías) para la elaboración de la figura de Toxcatl, flores, fruta o alimento para compartir entre todos al final de la ceremonia. IMPORTANTE LLEVAR TRASTES PERSONALES YA QUE NO QUEREMOS CONTAMINAR CON UNISEL Y PLÁSTICO. NO SE DARÁ NINGÚN TRASTE DESECHABLE. La cita en el Monumento a la Revolución es las 10 am para quien se atuendo o lo que se necesite; para a las 11 am salir caminando hacia el Huei Itualli (gran patio o plaza constitución). La figura de Huitzilopochtli se realizará durante la ceremonia y la elaborarán algunos representantes de grupo que se consensúe en el momento. Los banderines y collares de palomitas de maíz se entregarán en el monumento a la revolución a todos los que participarán en la caminata y a la gente en general se les obsequiará durante la ceremonia en el zócalo. 10:00 Concentración en el Monumento a la Revolución. 11:00 Inicio de la Caminata hacia el Zócalo. 12:00 Inicio de la Celebración de la veintena de Toxcatl: Danza Cósmica. Elaboración colectiva de figura de Huitzilopochtli (tzoalli, amaranto). Cantos y conmemoración de la matanza de 1520. Ofrenda de Palabra. 15:00 Repartición de la figura de tzoalli y compartición colectiva de alimentos, fruta y flores de la ofrenda.
Toxcatl, DETALLES Yei Cipactli Ilhuitl ipan Toxcatl Metztli ipan Ce Calli Xihuitl (viernes 31 mayo 2013, 5 a 9 pm)
Ciclo de conferencias en relación a Toxcatl con: Relación de la Cuenta del Tiempo por David Wood Cano Trecenario: Ce Quiyahuitl por Luciano Contreras «La Matanza de Toxcatl» por Ignacio Barragán
Tepeticpac Tlahtolcalli A.C.; Sadi Carnot # 68 Col. San Rafael, dentro del Pentathlón Universitario, cerca del metro y monumento a la Revolución.
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Toxcatl es el nombre del quinto “mes” o veintena del calendario solar o civil conocido con el nombre de Xiuhpohualli. Toxcatl significa literalmente “sequia” o “sequedad”. La veintena de Toxcatl inicia este año de 2013 el día viernes 31 de Mayo y finaliza el miércoles 19 de Junio.
Los danzantes, calpullis, grupos de danza u organizaciones que se dedican al estudio y difusión de la cultura nahua, nos reunimos para conmemorar la veintena de Toxcatl. Cuatro son principalmente las razones que nos mueven para conmemorar dicha veintena y para realizar una ceremonia a la usanza de los antiguos mexicanos.
Ce (uno). Esta veintena estaba dedicada a Huitzilopochtli, uno de los númenes o de las Fuerzas más significativas y representativas de la cultura mexihca. Huitzilopochtli (El colibrí zurdo o el colibrí de la izquierda) es la representación máxima del Sol. El Sol fue en la cosmovisión de los antiguos mexicanos el guerrero mayor por antonomasia, de ahí que la casta de guerreros mexihcas deseara morir en el campo de batalla, para ir a morar a su casa. Siendo el máximo guerrero, se atuendaba a Huitzilopochtli con su escudo y su arma letal, la serpiente de fuego o Xiuhcoatl, que es la representación simbólica de un rayo solar o de luz. En esta veintena los antiguos mexicanos elaboraban una figura de Huitzilopochtli hecha de huautli, amaranto o tzoalli. Al final de la ceremonia se comía la figura de Huitzilopochtli como un símbolo de comunión con la Fuerza Solar; algunas personas creen que la ingesta de la “carne” o del tzoalli dotaba de fuerza de voluntad, otros piensan que Huitzilopochtli es en sí mismo la representación de la fuerza de voluntad de los antiguos mexicanos. En esta ceremonia se hacían además, collares y guirnaldas de palomitas de maíz y banderines con los colores de Huitzilopochtli, predominando el azul turquesa, los cuales portaban los participantes y congregantes a dicha ceremonia.
Ome (dos). En la cosmogonía de los antiguos mexicanos, el Sol fue visto también como una gran ave que surcaba el cielo del Anahuac, por supuesto era un pensamiento metafórico y poético, no porque en realidad así lo pensaran, siendo los grandes astrónomos que fueron. A esa gran ave solar la asociaron con el águila y con el colibrí principalmente (aunque todas las aves fueron consideradas como animales solares generalmente). Es en la veintena de Toxcatl cuando el Colibrí de la Izquierda o el Colibrí Zurdo –Huitzilopochtli- “sobrevuela” por primera vez sobre el cenit de Mexihco-Tenochtitlan, sobre el cenit de su “jícara celeste”. Huitzilopochtli se encuentra en el punto más alto del cielo en relación con su observador (en un ángulo de 90° sobre su cabeza) por lo que no genera sombra en la persona; se decía entonces que Huitzilopochtli “devoraba” la sombra de los humanos, en la creencia de que con ello se llevaba todos los males, era considerado un acto de purificación y limpieza.
Yei (tres). Se cree, dado el nombre de la veintena que nos indica un periodo de sequía, que en esta veintena se hacían rituales de petición de lluvias. Los rituales consistían en danzas y cantos que invocan la lluvia, el uso adecuado de la Palabra y de los elementos como el caracol y el fuego (sahumador), y en la reproducción de sonidos que imitasen la caída del agua o de la lluvia con la finalidad de “llamarla” o invocarla.
Nahui (cuatro). Fue en una de las veintenas de Toxcatl pero del año de 1520, cuando los españoles al mando de Pedro de Alvarado, perpetraron una de las más grandes matanzas que se tenga memoria en la antigua Tenochtitlan. Hernán Cortés había dejada “encargada” la ciudad a su lugarteniente Pedro de Alvarado mientras iba a Veracruz a tratar de detener a Pánfilo de Narváez que venía a apresarlo por órdenes del gobernador de cuba. En Tenochtitlan se hacían los preparativos para llevar a cabo la ceremonia de Toxcatl. Cuando ésta inicio, Alvarado y los españoles que con él estaban, entraron a la plaza y empezaron a asesinar a los mexihcas, cortándoles brazos, piernas y atravesándolos con sus espadas, mientras otros disparaban sus cañones y arcabuces desde el palacio de Axayacatl donde se encontraban aposentados. Por igual mataron hombres, mujeres, jóvenes, ancianos y niños, todo aquel que estuviera en la plaza realizando la ceremonia. El motivo principal de la matanza fue despojarlos de sus joyas preciosas, principalmente de sus adornos y pertenecías de oro. Alvarado justificó su acto aduciendo a un intento de rebelión. Cabe mencionar que los guerreros mexihcas presentes en la ceremonia, no llevaban sus armas, porque era una ceremonia cívico-religiosa, así que no tuvieron oportunidad de defenderse. El cálculo de la cantidad de personas que murieron ese día no se sabe con certeza y es tema de discusión por los estudiosos, pero en términos generales, se estima que ese día murieron por lo menos alrededor de 10,000 personas.
Concluyendo, cuatro son los motivos principales para llevar a cabo esta ceremonia de Toxcatl:
1. Realizar la figura de amaranto de Huitzilopochtli que representa al Sol y a la Fuerza de Voluntad. 2. Resaltar la importancia del primer paso del Sol por el cenit de Tenochtitlan. 3. Hacer la petición de lluvias que corresponde a estas fechas, con su debido marco ceremonial. 4. Conmemorar a todas las personas, mexihcas, que fueron asesinadas cruelmente por los españoles y sus aliados.
Circulo de estudio, análisis y reflexión Tepeticpac-Tlahtolcalli Texto de Yaoehecatl
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Matanza del Templo Mayor
Mayo 20, 1520
Antes de salir de Mexico-Tenochtitlan a combatir a Pánfilo de Narváez, Hernán Cortés, perseguido por la Corona Española por desobedecer órdenes respecto a la invasión y colonización de territorios en tierra continental, dejó a cargo de Pedro de Alvarado una guarnición de ciento treinta españoles y numerosos tlaxcaltecas para evitar que el señor Motecuhzoma Xocoyotzin escapara.
Alvarado, con mucha suspicacia y recelo, veía que los mexica estaban inquietos por la proximidad de las fiestas de Toxcatl, ceremonia importante para ellos que ce celebraba los primeros cuatro ilhuitl de la veintena.
Antes de que iniciara la fiesta, Alvarado fue al teocalli donde vio a los señores y ofrendadores que ornamentaban los templos y tres efigies elaboradas con huauhtli, los cuales serían utilizados en la ceremonia con la que aparentemente se haría la petición de lluvias.
Alvarado sacó a tres supuestas víctimas y las llevó al cuartel argumentando que los mexihca-tenochca los condenaban a ser sacrificios humanos. Pero Alvarado no los “salvó” y muy al contrario, los torturó para que confesaran la fecha del supuesto levantamiento armado contra los europeos y sus aliados.
A uno de los “rescatados” del “sacrificio” le pusieron leños encendidos sobre el vientre y murió; los otros dos murieron también. Luego siguió con dos miembros de la familia del Huey Tlahtohuani, quienes dijeron cuanto quería escuchar Alvarado y lo que callaron lo dijo por ellos el intérprete Francisco, nativo originario de Cuetlaxtlan.
Las ceremonias de Toxcatl son dedicadas a Huitzilopochtli, representación del sol y a Tezcatl Ipoca Titlacahuan, representación de la memoria y el pensamiento ético en Anahuac, malinterpretados por los invasores como el dios de la guerra y el demonio, respectivamente.
Unos cuatrocientos señores –desarmados todos- asidos de las manos realizaban cantos y danza cósmica; poco más de tres mil los observan sentados. Con la mitad de sus hombres, (la otra mitad la dejó cuidando a Motecuhzoma que seguía preso), Alvarado se dirige al teocalli y cubre la puertas Coatepantli, mientras los mexica siguen danzando y cantando; de pronto, los españoles se lanzan sobre ellos espada en mano; hombres, mujeres, ancianos y niños, nadie escapa de sus filos mortales.
Los que tratan de huir por las puertas son muertos por las picas de los españoles; los que escalan la cerca por los ballesteros y las flechas de los tlaxcaltecas. Todos son asesinados. El patio se inunda de sangre. Alvarado quita sus joyas a los cadáveres de los danzantes, tarea que interrumpe porque ha sido dada la voz de alarma en la ciudad y los españoles tienen que responder a la indignación popular, deben fortalecerse y disparar sus arcabuces y piezas de artillería.
Dice el Códice Florentino: “cercan a los que bailan, se lanzan al lugar de los atabales: dieron un tajo al que estaba tañendo: le cortaron ambos brazos. Luego lo decapitaron: lejos fue a caer su cabeza cercenada. Al momento todos acuchillan, alancean a la gente y les dan tajos, con las espadas los hieren. A algunos les acometieron por detrás; inmediatamente cayeron por tierra dispersas sus entrañas. A otros les desgarraron la cabeza…y había algunos que en vano corrían: iban arrastrando los intestinos y parecían enredarse los pies en ellos… otros… aparentando ser muertos, se salvaron. Pero entonces si alguno se ponía en pie, lo veían y lo acuchillaban. Y los españoles andaban por doquiera… por todas partes rebuscaron”.
Confirman la matanza los informantes de fray Bernardino de Sahagún: «Al momento todos acuchillan, alancean a la gente y les dan tajos, con las espadas los hieren. A algunos les acometieron par detrás; inmediatamente cayeron por tierra dispersas sus entrañas. A otros les desgarraron la cabeza: les rebanaron la cabeza. Pero a otros les dieron tajos en los hombros: hechos grietas, quedaron desgarrados sus cuerpos. A aquellos hieren en los muslos, a éstos en las pantorrillas, a los de más allá en pleno abdomen. Todas las entrañas cayeron por tierra y había algunos que aun en vano corrían: iban arrastrando los intestinos y parecían enredarse los pies en ellos. Anhelosos de ponerse en salvo, no hallaban a donde dirigirse».
Por fin los guerreros mexicah-tenochca son rechazados; al día siguiente se hicieron los funerales de los caídos: los mejores guerreros y ofrendadores. Al terminar la ceremonia fúnebre, trataron de incendiar el lugar donde estaban acuartelados los españoles, quienes subirían a Motecuhzoma Xocoyotzin a la azotea y desde ahí, conminará a su gente a la paz.
Los guerreros detendrán el asalto pero harían un sitio. Fue entonces cuando el HueyTlahtohuani envió su embajada a Cortés, y Alvarado la noticia de su situación, argumentando, falazmente, un supuesto ataque a traición por parte del pueblo que los recibió, no como dioses, sino como emisarios de un gobernante que nunca piso ni se interesó en conocer, sólo explotar, estas tierras sagradas de Anahuac.
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Sobre las reuniones semanales de gestión:
«Compañeros: El sabado que tuvimos la oportunidad de platicar con el maestro Ocelocoatl, nos comentó que le da mucho gusto que nos interesemos en rescatar, difundir y unificar los conocimientos ancestrales de estas tierras y que por su parte también esta de acuerdo en realizar el cambio de fecha, también se habían dado cuenta que la fecha no es la correcta, sin embargo dice que por «tradición», la gente ya se ha acostumbrado a que el 17 de mayo se realice dicha celebración, además nos aseguró que después un trámite de aprox. 4 meses, les han otorgado el permiso en Zocalo, despues de 7 años de no habérselos permitido. Nos dijo que vería muy dificil el hecho de cambiar la fecha, no por su parte, sino por el permiso que ya tienen, pero que no se cierra a esta posibilidad y nos mantendrá informados al respecto; inclusive nos dijo que si este año no es posible realizar el cambio, el próximo ya es seguro que se haga en la fecha correcta. A su vez le invitamos a participar en el «tlahtocan» que organizamos cada martes, esperamos que esta vez pueda asistir, ya sea el o alguno de sus representantes. De cualquier manera, quedaron que nos apoyaran en la celebración que realicemos nosotros; recíprocamente los compañeros que asistimos, también consideramos el participar con ellos, independientemente de la fecha que quede establecida para la celebración de este año.
Considero un gran avance en los planes que tenemos; estamos viendo que en verdad todos llevamos una misma bandera y deseamos lo mismo para nuestra tierra y nuestra cultura, quizá lo que haga falta y que ya estamos haciendo, es el uso de la palabra, la union y la voluntad de hacer las cosas. Aún nos queda mucho por hacer y decidir. Nos vemos el martes 8 pm. ¡Mah moztlatzinco mitzonchicahuac!» * Armando Castelán Olmedo (Calpulli Toltecayotl)
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Diseño 01 Diseño 02 ************Celebraciones Toxcatl en el Zócalo DF:
Comentamos y aclaramos: Éste fin se lleva acabo la «Ceremonia de Toxcatl» por parte del Zemanahuac Tlamachtiloyan (18-19/05/2013), la cual dirige el compañero Ocelocoatl. Lamentablemente por tiempo y otras pequeñas cuestiones, las cuales están publicadas en éste grupo en días atrás, no se hizo «una sola» en el Zócalo. El viernes 31 de mayo y 1 de junio de 2013 se llevará acabo también la «Ceremonia de Toxcatl» la cual está basada y sustentada con documentos, fuentes, cálculos y ajustes, comentados y trabajados en las reuniones en Sadi Carnot 68 Col San Rafael. Donde nos indica que fue en un Ilhuitl Ehecatl ipan Toxcatl Metztli (retorno viento del mes Toxcatl), cuando se llevaba acabo la «ceremonia de veintena» y donde ocurrió «La Matanza de Toxcatl» , así, el día Ehecatl de Toxcatl será paralelamente al día gregoriano el sábado 1 junio de 2013. El colectivo conformado por varios representantes de Grupos, Calpulli, AC, etc. tenemos la convicción de realizar y llevar acabo las ceremonias, conmemoraciones, representaciones, fiestas, etc, más significativas para nuestra cultura autóctona y apegados a nuestra cuenta del tiempo, a los acontecimientos astronómicos y sustentado fielmente con fuentes y arduo trabajo de investigación. Ésto, de una manera colectiva donde todos los participantes seamos los responsables y nos comprometamos a apoyarnos mutuamente. Sin que haya una sola persona que «ordene que hacer» si no que todos en Tlahtocan o consensuadamente decidamos que se hará. De esta manera y por tal razón, estaremos en la ceremonia de éste fin (18-19 mayo) con el Zemanahuac, así también y a palabras del compañero Tonalcuicatl y Ocelocoatl, el Zemanahuac será parte de la ceremonia del 31 de mayo y 1 de junio. Por que no hay discrepancias, ni se pretende «hacerla mejor», ni mucho menos quitar méritos u ostentar y pregonar «verdades». Esto ya no cabe y ni cabrá con los que estamos conscientes que necesitamos «UNIDAD». Esto no es de un solo grupo o de una sola persona, es de todos y para todos, por tal, todos podemos participar. De todos depende que nuestra cultura autóctona vaya resurgiendo de una manera auténtica y lo más respetuosa hacia nuestro en torno. Conviviendo con la multiculturalidad que existe en el presente, pero haciendo énfasis que con los principios heredados de nuestros antepasados a nivel social, político, económico y educativo es que se llegó a ser y tener una civilización y una cultura donde había opulencia; misma que si la trabajamos todos juntos o colectivamente podemos obtenerla una vez más y así, ir erradicando el caos que existe en todos los niveles en nuestra nación. Colectivo de grupos Reuniones Lunes de 8 a 9 pm Sadi Carnot 68, Col. San Rafael Metro Revolución, Metrobus Tabacalera alianzanahuaca.org
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Sobre Huitzilopochtli y la figura de Tzoalli:
Se Relaciona con el amaranto por su «Fuerza Logradora» «El amaranto es muy resistente a los climas fríos y secos, incluso crece en suelos pobres y húmedos en zonas muy tropicales y con lluvias muy frecuentes. Además tiene un alto nivel alimenticio, lo cual lo hace una excelente alternativa para regiones con dificultades para la siembra de otro tipo de cereales.» «Huautli: es termino de las semillas que conocemos como amaranto.» «Tzoalli» masa compuesta de semillas de amaranto y miel de maguey»
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Semillas de la Noche (TOXCATL)
Era la fiesta más importante, entre los mexicas. Al Templo Mayor lo adornaban bellamente; los niños eran vestidos de colores; se despoblaban las calles de iniciados que comenzaban su recogimiento días antes, cuando la luna era nueva se iban a Malinalco y los macehuales, igual hacían la penitencia a Chalman; iban de visita al Señor de las Cuevas, El Señor de la Montaña les daba poder para mirar en la noche. Muchos de ellos allí ayunaban, oraban, hacían su penitencia, otros se recogían en Cuauhxicalli. Venían de muchos lados, de los rincones más alejados del Anahuac, desde Totonacapan llegaban los voladores Águila; de Xilotepec venían cantores y danzas; de Xochimilco las doncellas llegaban a danzar igualmente a la Madre Tierra. Las milpas estaban con los pequeños brotes de las muy chiquitas hojas del maíz; flores brotaban ya por doquier, el olor de las aguas era latente, abundaban los niños que se la pasaban horas enteras chapoteando en los canales, pues el calor ya se sentía a plenitud. Era una época bella la de la veintena de Toxcatl, venían mercaderes desde rincones lejanos del Anahuac, llegaban los artesanos a intercambiar sus trabajos. Este año la fiesta estaba austera. No llegaron los de siempre.
Ilhuitltlmazatl estaba danzando, cuando se cerraron las puertas del templo, el brillo del metal plateado que tenían los españoles era como un mal augurio, el olor que tenían era también como un motivo desazón. “En nuestras fiestas sólo moría un ser digno; un designio del cielo nos lo imponía. Pero esto que pasó no era ni con mucho el sentimiento que teníamos de la guerra, de la vida, del sacrificio, de la muerte”.
Ilhuitlmaztl cantaba cuando las puertas del templo se bloquearon. Luego el desconcierto, la impotencia, el llanto, el miedo, el horror, la parálisis. El filo de los cuchillos de metal destazando, la corredera, el grito de dolor y espanto. Sangre manchando todo, sangre tragada por el degüello, mientras se asfixia casi instantáneo.
“Correr a las puertas para encontrar más filo de metal, envalentonarse y golpear con puños la armadura de los que asesinan, hasta que los nudillos sangran y el metal nos corta las manos, se nos entierra en el pecho. Caen las plumas, el jade rueda, el oro es arrancado, hiriendo las correas de los collares en el cuello, el oro salpicado de la sangre preciosa de la vida, mientras la muerte nos espera amorosa”.
Pero hay antes de su paz, un río de dolor, dolor iracundo, dolor delirante, miedo saliendo abrupto de los ojos y así se quedan los ojos cuando el alma al fin se escapa. Los tambores llamados huehuetl, ruedan sonando su madera al pegar en el piso aún a pesar de la gritería y el desasosiego suenan.
“Es la fiesta de Toxcatl, muy importante, la de nuestro señor Tezcatlipoca y la del Niñito Sol, La de Huitzilopochtli. Es el tiempo en que el Sol pletórico nos da su calor y una luz que cae de manera tal sobre nuestra ciudad, viene con una carga energética de purificación plena. El alma de los hermanos, habrá de caminar los senderos del Sol, para llegar a su mansión cuando amanezca; no será una muerte ociosa, verán sus ojos la luz de la Casa del Alba y desde allí los cobijará el Sol, los adornará de sus plumas doradas, les dará digno abrigo, les cantará un canto lleno de luz. Serán bien llegados al Tonalcalli”.
Ilhuitlmazatl, tenía en sus ojos un agobio, agonizaba, mientras, era atendido por una bella mujer. Los españoles habían saciado su gozo lujurioso de sangre y oro. Alrededor del patio la sangre teñía, dejaba su olor flotar en el ambiente; los gemidos y sollozos, eran de un dolor tal, que aun cuando sonaban quedito, taladraban el alma. Las plumas que cayeron al suelo eran movidas por una brisita que venía de fuera del templo y se metía en él.
Sin embargo, el consuelo también tenía su lugar, la muerte era a la vez un bálsamo y una posibilidad de trascendencia de que la vida cumplió su sentido y encamina esta vida su sendero en el espacio real, el que está más allá de ella; más allá de la vida su continuidad y su razón misma de ser. Por allá moría alguno más, algún poeta, Aquel un sacerdote que también moría. Murieron músicos y danzantes al por mayor, estaban los mejores. Quizás por algún rincón del templo sonaba como recurso supremo de la espiritualidad de aquel pueblo a pesar guerrero, muy religioso, alguna alabanza entre gemidos, estertores de un cuerpo que libera al fin el espíritu.
Ilhuitlmazatl como cada uno de los allí reunidos en el festín de la infamia, estaba con su historia de vida cortada de una manera cruel, no sólo por la violencia, la sangre, el filo de las armas, eso, que hay en la guerra era para ellos un honor, morir peleando, verse el rostro en el ritual sangriento de la guerra, morir mirando al que en igualdad de circunstancia mata, con un fin supremo incluso, como un recurso extraño de la espiritualidad, de una cultura de guerra en un sentido real, un compromiso ante las leyes de la vida, de la naturaleza; donde la guerra cumple un mecanismo de orden y de sentido natural. ¡Pero esto! ¿Qué era para ellos esto?, asesinos con los ojos cubiertos, guerreros que a toda costa preservan la alevosía y la ventaja ¿Acaso no era indigno?, ¿Acaso esa circunstancia de indignidad, no les causaba un asomo de duda para matar así?, ¿Acaso no debían ser sancionados por sus capitanes de guerra o por su Dios de Paz?
Eso realmente dolía. Pero dolía también que los superiores de Tenochtitlan hubieran permitido que eso pasara. El rumor de que esto podía pasar era una certeza.
Ahora la vida en su último instante dolía, el llanto era por que el camino tantas veces visto se diluía con esa circunstancia de sinrazón. Entonces un murmullo como venido de un sentimiento contenido, se convertía iracundo en gritos, en aullidos que de pronto sonaron, antes que los españoles lo entendieran a cabalidad, pues estaban todavía en la enajenación que deja matar.
Ya saciado el gozo, los españoles huían, corrían despavoridos a refugiarse en el palacio de Axayacatl. El pueblo al percatarse de la horrenda masacre hizo que los guerreros como pudieran fueran llegando, que vinieran los hombres con sus armas dispuestas para defender la honra de la nación mexicana. El pueblo mismo se aprestó con piedras, palos y con sus puras manos, en alto para honrar a sus muertos.
Ilhuitlmazatl agonizaba. Hablaba, era inaudible lo que decía. Pero se sentía que lo que sus palabras querían decir era una razón poderosa, ¿Acaso la de los demás no lo era? Ella la mujer tan bella: Tlazolxochitl, se acercó para oírle. Ella le conocía pero en el espanto y rabia, no atina a entender que era Ilhuitlmazatl. Se acercó, le era inevitable acercarse a ese hombre magnético y más en ese momento. Gimiendo Ilhuitlmazatl sonrió al ver la mujer. Ella le reconoció y sintió que el corazón se le hacía un nudo. Lo amaba.
Texto: Tlacuilo Antonio Cruz
SALUDOS OMETEOTL
agradeciendo eternamente toda su sabiduria
OMETEOTL